¡Hola a tod@s! Ha amanecido soleado y fresco este domingo madrileño, y sin haber madrugado demasiado hoy, cojo el metro para dirigirme a casa de Susana donde nos encontraremos para tomar nuestra segunda lección de cocina.
Llego como siempre veinte minutos antes, me paso por la Casa de Lope de Vega, no me dejan entrar , camino por aquí y por allá, y luego me voy para lo de Su. Para no perder la costumbre, toco el portero equivocado y una voz soñolienta me dice que allí no vive ninguna Susana (ja,ja,ja)
Ya esta nuestra profe esperándonos con su delantal puesto y los cacharros ya listos. Nuestros invitados de hoy son: María, la hermana mayor de Su, su esposo Javi, el pequeño Mateo que aún vive en el calor del vientre y Carla la pequeña de la familia Senosiain. Han salido a dar un paseo y seguramente a “picar” algo no va a ser que estas novatas les hagan pasar hambre.
¡Llega también nuestra Sandri cargada con su cámara y trípode porque hoy nos tocará sesión de fotos!
Nos ponemos manos a la obra (aclaro aquí que debimos recurrir a nuestros estimados “chinos “para comprar el cava; cabe aconsejar a nuestros lectores que lo recomendable es tener todos los ingredientes en casa, ja, ja, ja). Hoy hay mucho por hacer, así que yo me he involucrado más que nunca pelando, picando, removiendo, rellenando y empanando.
A Sandra lo que mejor se le ha dado es lo de ponerle cava al pollo y de paso al cuerpo, lo cual le ha sentado de maravillas, porque la cocina se le ha dado mejor que nunca hoy. Para ser justa diré que además de beber, ha tomado las fotos y se ha dejado la piel escribiendo las entradas de las recetas y subiendo fotos y demás.
¡No se qué haríamos sin esta “Bill Gates” de Móstoles!
Hemos comenzado con el pollo al cava ya que nos llevo dos horas de cocción. Debo decirles (que quede entre nosotros) que nos hemos reído mucho cuando introducimos las cebolletas y la manzana vía anal (para no decir que se las metimos al pobre pollo por el culo ja, ja, ja).
Y mientras nuestro amigo se iba dorando en el horno, nosotras nos pusimos a limpiar los mejillones, preparar la bechamel, rellenar las cáscaras, empanarlas y obtener unos deliciosos Tigres. ¡Y si no pregúnteles a María y a Mateo!
Yo los probé por primera vez y debo decirles que me supieron a gloria. Invito a todos a animarse a probar nuevos sabores y descubrir el increíble mundo de sensaciones que se despiertan en nuestro cuerpo y nuestra mente.
Luego le toco el turno a los huevos rellenos de la Abuela Charo (Susana luego la llamo para comentarle del éxito de los mismos) que la verdad son súper fáciles y quedan muy sabrosos. Les recomendamos acompañarlos con la deliciosa salsa que preparamos con las yemas y leche ¡Le da un toque muy suave!
Y mientras Susana fritaba los tigres y los huevos, Sandra preparaba el relleno de la sabrosísima Piña Sorpresa, y yo montaba las claras para ponerle el broche de oro a este postre muy sencillo, rápido y delicioso.
Los últimos minutos fueron de trabajo intenso, ya que los comensales habían llegado y revoloteaban ansiosos por la casa. María nos dio una mano poniendo una mesa muy bonita y Javi haciéndonos reír un poco.
Y por fin…¡a comer se ha dicho! ¡Y como hemos comido! Nos hemos puesto como la”moñona” (palabras con las que Sandra cierra últimamente cada encuentro, ja, ja, ja) y hemos vuelto a disfrutar de otra mesa juntas y junto a gente que nos quiere y sobre todo, confía en nosotras.
Pero acá no termina la historia…vinito, un poquito más de cava, sesión de maquillaje a cargo de Susana y luego book de fotos para el blog y la página de Facebook. Risas, más risas, poses que no convencen, ¡gente que sale con “cara de pan”,ja,ja,ja! Hasta que por fin se produjo el milagro: ¡salimos BIEN!
Y como broche de oro: nuestro blog ya está abierto y nuestras aventuras y andanzas ya dejan de ser solo nuestras para convertirse en la de todos ustedes que nos siguen y nos apoyan en esta hermosa aventura!
“¡Qué poyón nos hemos comido hoy amigas!”
27 de Noviembre de 2011
